¿Se acuerdan de mi artículo anterior sobre los dragones? Si no, no importa, pueden ir a verla aquí: https://blog.myl.cl/blog2/blog2/yo-dragon-vol-i/ Esta es una continuación orientada a una especie muy típica del dragón occidental, aquel de origen germánico.
El dragón dentro de un contexto europeo es representado típicamente como un reptil gigante, escupiendo fuego por la boca, con escamas, cuernos, dos alas, dos o cuatro patas y una cola larga y musculosa. Algunas representaciones de dragones muestran plumas en las alas, crestas, melenas ardientes, pinchos de marfiles que recorren su espina dorsal y diversas decoraciones exóticas.
La sangre del dragón germánico a menudo contiene propiedades mágicas. Por ejemplo, en las diversas historias de Sigfrid, donde esta le da resistencia sobrehumana y la capacidad de entender diversos idiomas, como aquel que hablan los hunos, o el canto de los pájaros.
El típico dragón protege una caverna o castillo lleno de oro y tesoros y, a menudo, es asociado con un gran héroe que trata de matarlo.
Orms o Wyrms
La palabra dragón en la mitología germánica y sus descendientes es wyrm o worm, dependiendo de que tenga alas o no, siendo la primera palabra la más usada para hablar del dragón alado y de cuatro patas. Hay que destacar que la palabra vendel o en nórdico antiguo, es ormr.
En general en estos mitos el dragón es un ser avariento. Además son seres independientes que rara vez viven en comunidad. Prefieren tener su propia guarida, generalmente una cueva grande, donde guardar sus pertenencias y preciados tesoros. Para un dragón, su tesoro es algo muy valioso; hace su cama con montañas de joyas y monedas y se deleita mirándolas.
Su piel es escamosa y con los años se va haciendo más dura. Además, suele tener gemas engarzadas entre las escamas que desvían las flechas. Por esta razón, se piensa que los dragones adultos son inmunes a los proyectiles.
La inteligencia de un dragón es variable, puede ir desde la de un astuto animal hasta la de un ser inteligente como pocos. Independiente de su inteligencia, un dragón es un ser con los sentidos muy agudos, por lo que puede detectar incluso a seres invisibles.
Además, un dragón tiene clariaudiencia natural en su guarida y escucha hasta el mínimo sonido dentro de ella.
Por lo general, el vuelo del dragón es muy ágil a pesar de su gran tamaño. Un dragón es un ser mágico que tiene capacidad de lanzar conjuros. Estos conjuros son adquiridos durante los años, de ahí que un dragón adulto sea más poderoso mágicamente que uno joven.
A estos dragones se les encuentra en entornos fríos y húmedos como los pantanos boreales. Tienen escamas negras y brillantes, por eso les gusta salir a volar por la noche, cuando pasan desapercibidos. Tienen la capacidad innata de respirar agua, por lo que se suelen esconder en pantanos a la espera de una buena emboscada.
Pueden escupir fuego, al que son inmunes como método de ataque, y son capaces de lanzar conjuros para corromper el agua, hechizar a reptiles y producir un crecimiento vegetal en la zona donde se encuentran.
Sus guaridas están en cuevas húmedas y cavernas subterráneas. Allí les encanta acumular monedas.
Fafnir, a pesar de ser originalmente un enano, sería un miembro de esta especie.
Lindworm y wurms
Serpientes gigantes, terrestres, muchas veces devoradoras de humanos. representaban plagas tales como la guerra o la peste.
En la Edad Media se pensaba como en la época pagana que poseer la piel de un lindworm concedía mejores conocimientos en medicina y en la naturaleza. Esta creencia encontraba su origen en el simbolismo de la serpiente.
Estos aparecen en varios símbolos heráldicos, además de los barcos sajones y vikingos. Los dragones esculpidos sobre los drakkars eran denominados dreki en nórdico antiguo, pero pertenecen también a esta especie.
Níðhöggr sería una versión extrema de este tipo de dragón terrestre.
Las versiones marinas como Jörmundgander, así como sus predecesoras y sus derivados, son productos de los primeros viajes marinos de larga distancia.
Wyvern
Eran muy comunes en la mitología franca, ergo que pasara de ella a la heráldica popular europea.
Aunque las concepciones varían de pueblo en pueblo, podemos decir que es una criatura alada legendaria con cabeza de dragón, del que se decía que exhalaba fuego, aunque según los mitos del sur europeo se dice que poseía un aliento venenoso. Lo permanente es su cuerpo reptiliano: dos patas y una cola con púas.
La supuesta variante marina tenía una cola de pez en lugar de la cola espinosa de dragón.
A menudo se confunde su figura con la de un wyvern, al que se suele representar con cuatro patas y un par de alas, en lugar de las dos patas y el par de alas.
Me regresé al post anterior para leerlo, excelente maestro ambos muy ilustrativos y es muy interesante la concepción de dragón según la cultura. Estaré al tanto de todos los posts.