El Capitán James Cook fue uno de los hombres más viajados de la historia: dio tres vueltas al mundo en una época en la que el ser humano quiso conocer, ordenar y catalogar todo. Representa el cambio de mentalidad racionalista en acción y encarna el espíritu aventurero, la autodisciplina y la superación, y también es uno de los rostros del colonialismo inglés que llegaría en los años siguientes.
El explorador no solo amplió los horizontes de la astronomía, la botánica, la zoología, la antropología y muchas otras ciencias, sino que también contribuyó al auge del naciente Imperio británico. Le proporcionó colonias tan valiosas como Australia, Nueva Zelanda, las islas de la Sociedad o Hawái, y abrió rutas que serían muy transitadas en el hemisferio sur. En definitiva, Cook cambió la visión y la dinámica del mundo justo cuando este entraba en una nueva era tras la de los grandes descubrimientos.
Su pericia y resolución en estas misiones le valieron el reconocimiento del Almirantazgo, que lo puso al mando de la nave Endeavour. En 1766, la Royal Society lo contrató para viajar al océano Pacífico, con objetivo de observar y documentar el tránsito de Venus sobre el Sol. Navegó el Atlántico Sur, dobló el cabo de Hornos y continuó hacia el oeste por el Pacífico, hasta llegar a Tahití, en donde se debían llevar a cabo las observaciones, se encargó de la construcción de un pequeño fuerte y observatorio.
Cook obligaba a su tripulación a comer cítricos y chucrut, aunque todavía nadie entendía las razones por las que ingerir estos alimentos prevenía el escorbuto. A su regreso, sus notas y diarios fueron, con lo que se convirtió en una especie de héroe entre la comunidad científica.
En 1772, James Cook partió al mando de la nave Resolution en busca de la Terra Australis, un continente del cual se pensaba que Australia era sólo una parte. Lo secundaba otro barco, el Adventure. Navegó rumbo sur hasta la Antártida y el 16 de enero de 1773 consiguió atravesar el círculo antártico. Luego llegó a las islas que hoy llevan su nombre y al año siguiente alcanzó las islas Vanuatu, las Marquesas y Rapa Nui.
En su último viaje, Cook comandó el HMS Resolution, en 1778 se convirtió en el primer europeo en visitar las islas Hawái, a las que llamó islas Sandwich.
Cuando los exploradores llegaron a la bahía de Kealakekua el 17 de enero, 10 000 hawaianos salieron a recibirlos. Los isleños estaban celebrando la fiesta de Makahiki en honor del dios Lono. Por lo visto, creyeron que Cook era dicho dios, por lo que tanto él como sus hombres fueron nuevamente objeto de extraordinaria bondad y hospitalidad.
Viajó hacia el este, para explorar la costa oeste de América del Norte. Exploró e hizo mapas de la costa, desde California hasta el estrecho de Bering. Cook volvió a Hawái en 1779. Para su sorpresa, en esta ocasión la recepción en las islas fue hostil, las razones de esto se debaten aún, pero lo cierto es que sufrió el robo de una lancha transportadora.
En modo de represaría y para lograr negociar intentó secuestrar a Kalaniopu’u, monarca de la isla de Hawái, esta desproporcionada medida condujo a la muerte del capitán, a manos de los nativos que buscaban defender a su rey.
La llegada de Cook a Hawái, esta fue seguida por migraciones en masa de europeos y americanos a las islas, que acabó con el derrocamiento del Reino de Hawái, el reino original de la monarquía nativa de las islas. El historiador inglés Robert Tombs habla de Cook como “la figura principal de una era de exploración científica”, aunque otros sostienen que Cook fue un facilitador del colonialismo británico en el Pacífico.
Gladiadores, si han llegado hasta acá les dejamos el esperado spoiler.
Excelente lección de historia, fascinante y fácil de digerir, pero por la chita que no me agrada esta figura histórica jajajaja
Si te fijas, Cook es una figura trágica, con él se cierra una era de exploración y se abre una de colonialismo más salvaje que él que se desplegó en América o India, Cook muere en cierta inocencia del explorador, muerto por un punzón que él mismo introdujo a las islas. A mi me cuesta también narrar estos encuentros, pero es bueno mirarlos críticamente.
Excelente, cada día se aprende algo nuevo